viernes, 10 de septiembre de 2021

Sobre Casas vacías de Brenda Navarro

 Casas vacías es la primera novela de Brenda Navarro (Ciudad de México, 1982). Está organizada en tres partes; Primera, Segunda y Tercera. En cada una de ellas, comparten espacio las dos narradoras. Antes del cambio de voz, en cada uno de estos tramos hay un fragmento o un poema de Wislawa Szymborska. Tranqui, como si el tono de estas dos mujeres desgarradas no fuera suficiente.

La novela es cruda y el hecho de que cada personaje narre desde una primera persona, con su léxico y su visión del mundo, desde su realidad y a través de sus motivaciones, genera una empatía y una intimidad muy fuertes. Por eso el libro nos pega tanto, en diferentes momentos y desde diversos ángulos.
Este libro habla de la de la maternidad desde un lugar de desesperación. Pero también nos habla de las mujeres, o de la Mujer. La mujer-madre como una especie diferente de mujer.
Me gusta mucho la dualidad que plantea la novela desde esta dupla narradora sin nombre, estas mujeres podrían ser o son cualquiera de nosotras en algún momento de nuestra vida como mujeres. Los hombres en cambio tienen nombre y a veces, más de uno. La única que es nombrada es Nagore, porque ya no es hija de ni madre de nadie. Una niña que se va haciendo mujer durante el transcurso de la historia y que se construye de una manera diferente a si misma, pese a todo.
Una historia atrapante, contada en párrafos que son como exhalaciones de aquello que ya no se puede aguantar más dentro. Por momentos, sentí estar leyendo a Clarice Lispector, en esa forma punzante de mezclar la muerte en las posibilidades de la vida cotidiana, en la intensidad del dolor que encuentra, sin embargo, la forma de ser nombrado por la autora.
No puedo evitar pensar en las partes del libro como los trimestres que atraviesa un embarazo y creo que me queda pendiente una relectura para encontrar muchos otros detalles ocultos en este libro intenso que no recomiendo leer un domingo de lluvia, pero que sin dudas, recomiendo leer.

 

"(...) Hay que tener el suficiente arrojo para matar y matarse y así desafiar al instinto. (...)"

Sobre Casas vacías de Brenda Navarro

  Casas vacías  es la primera novela de Brenda Navarro (Ciudad de México, 1982). Está organizada en tres partes;   Primera, Segunda y Tercer...