viernes, 30 de julio de 2021

Fósiles en la memoria

 Cada tanto, pero cada vez más seguido, me gusta usar esa función de Whatsapp que es "Archivar todos los chats". Por un lado, me da la sensación revolucionaria de que estoy negando la comunicación con todo el mundo posible y por otro, de limpieza. "Pulsa el ícono para iniciar un nuevo chat", me dice la pantalla. Como si todo se pudiera reiniciar y empezar de cero, con ese simple acto. Me gustaría que mi cerebro tuviera esa función para los recuerdos, un archivar todo, sin miramientos ni distinciones. Todo por igual al arcón de la corteza prefrontal y espacio liberado. Que no hubiera posibilidad de volver a los pensamientos hasta que no fuera necesario, hasta que algún estímulo los despertara. Que no estuvieran ahí disponibles para rumiarlos y no llegar a ningún lado, porque a veces los pensamientos se vuelven como capturas de pantalla: están ahí, fijos, sin que pueda hacer nada para que se modifiquen en lo más mínimo por más vueltas que les de. ¿De qué me sirven, entonces, hoy, si no puedo hacer nada con ellos más que contemplarlos? Son los fósiles de un pasado que no puedo tocar, ni cambiar; mucho menos arreglar. No quiero tenerlos presentes salvo que los vaya a buscar y sin embargo, muchas veces insisten. Con notificaciones intensas, insisten en hacerse notar.

También me gusta la otra parte, cuando los chats van saliendo del archivo en orden de aparición. Me gusta ver a quién busco primero, quién me busca a mí. Lo verdadero, la búsqueda del hoy. Las plantitas que parecían resecas y de pronto, reviven y florecen, con un hermoso espacio blanco debajo, que no conoce de jerarquías.
Me gusta lo minimalista cuando estoy en mi cueva, como ahora. Lo indispensable. Y seguramente, Whatsapp no es una de las cosas necesarias, pero si la gente que aparece en forma de cartelitos, que es la manera en la que la realidad se construye en estos días tan raros.
Después pienso que archivar todo es como meter lo que barrí y ya no sirve abajo de la alfombra, y pienso que tal vez, lo mejor sería la drástica decisión de "Vaciar todo". Los chats, digo. Con los recuerdos, llevo años intentando y no me sale.

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